El impacto que genera el software en la vida de las personas es cada vez más profundo, por lo que, en la actualidad considerar las implicaciones éticas ha tomado gran relevancia. En todas las sociedades y especialmente en las modernas, las actividades cotidianas cuentan con uno, desde algoritmos de recomendación hasta sistemas de inteligencia artificial, de alguna u otra forma transforma las interacciones diarias.
El desarrollo ético de software hace referencia a la consideración de las implicaciones sociales y morales de las distintas aplicaciones que se construyen, en ese contexto, los desarrolladores deben implementar prácticas eficaces de seguridad, medidas que protejan la privacidad y que brinden garantías de accesibilidad para todos.
Para garantizar un desarrollo ético de software se debe priorizar aspectos como:
Diseño centrado en el usuario y la sostenibilidad a partir de la creación de productos eficientes, intuitivos y amigables.
Pruebas exhaustivas que permitan identificar y solucionar posibles vulnerabilidades, a fin de garantizar que los datos estén realmente protegidos.
Inclusión y diversidad, lo que implica tener presente las diferentes necesidades de los usuarios al momento de diseñar las aplicaciones.
Investigación exhaustiva y procesos de desarrollo sólidos que identifiquen requerimientos y oportunidades del mercado.
Profesionales altamente calificados que aseguren una implementación acorde de la tecnología y la resolución de posibles dificultades técnicas.
Un plan claro y realista que defina los objetivos, el alcance, los plazos y los recursos que se necesiten para llevar a cabo la creación de la tecnología.
Generación de nuevas ideas y enfoques a partir de soluciones innovadoras y creativas.
Normas y regulaciones relevantes que garanticen la seguridad y privacidad de los usuarios.
Evaluación de posibles impactos negativos y garantizar que los beneficios tecnológicos se distribuyan de manera justa y equitativa.
Contemplar la ética y sostenibilidad en el desarrollo de software es categórico para el perfeccionamiento de aplicaciones eficientes que respeten y resguarden la privacidad y seguridad de los usuarios.
