Todo lo que concierne al desarrollo de software se encuentra en constante evolución, se trata de un entorno ideal para la innovación y el avance tecnológico. La llegada de un nuevo año nos acerca a las tendencias emergentes que toman notoriedad en esta industria.
Se avecina un panorama que apunta a redefinir la manera en que trabajamos, nos comunicamos y vivimos nuestra vida cotidiana. Entre algunas tendencias para este ámbito se destacan:
Inteligencia Artificial (IA): pasaría a convertirse en una parte integral del proceso de desarrollo de software, se esperan herramientas y plataformas basadas en inteligencia artificial que ayuden a la automatización de tareas repetitivas, generación de códigos y depuración. Sus herramientas como las de prueba y revisión ayudarán a garantizar mayor calidad y ciclos de desarrollo más vertiginosos.
Computación cuántica: podría darse con mayor fuerza su integración en el desarrollo del software, su potencial puede ayudar al resolver situaciones complejas que en la actualidad aún se dificulta con las computadoras clásicas, esto implicaría una revolución en la industria de la criptografía, optimización y simulación.
Computación de borde: los desarrolladores de software se centrarán en crear aplicaciones que puedan ser aprovechadas por la informática de punta para un procesamiento más rápido y una latencia reducida.
Realidad extendida (XR): se anticipan más aplicaciones que incorporen a esta tecnología, irían desde capacitaciones inmersivas hasta experiencias mejoradas para los clientes, en ese contexto, los desarrolladores de software deberán explorar nuevas formas de aprovechar su potencial.
Desarrollo de ciberseguridad: será una de las prioridades de los desarrolladores de software durante el 2024. Los equipos de desarrollo deberán anteponer la seguridad, implementando medidas sólidas durante todo el ciclo de vida del desarrollo.
Entornos de desarrollo colaborativo: el trabajo y la colaboración remota persistirá conduciendo al desarrollo de entornos, herramientas y plataformas que faciliten la colaboración en tiempo real.
Desarrollo de software sostenible: tendrá una tendencia creciente en la optimización de códigos para lograr eficiencia energética, reducir el consumo de recursos y minimizar la huella de carbono de las aplicaciones de software.
En lo que refiere al desarrollo de software, el 2024 estaría marcado por significativos cambios, llevando a los desarrolladores a adoptar mecanismos y herramientas que se adecuen a la evolución constante enfocadas a crear soluciones innovadoras, eficientes y seguras para el futuro.
